GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ.

He regresado a "Memorias de mis putas tristes" de Gabriel García Márquez y me he dejado envolver por su lenguaje hermoso y voraz, (personaje en si mismo), con el que nos hace cómplices de un amor urgente...o pesadumbres varias de afán interior.
Todo es culpa de Agosto. Noventa cumpleaños que le cita sin el presentirlo con la pureza más desnuda; mientras escribe cartas de amor, en un periódico local y se deja alcanzar por algún que otro desteñido recuerdo...
Delgadina, dormida, transforma su pulso casi centenario en cáos primario , en vida sin más. Y lo asoma a las vísperas de otra historia; cuyo primer día espera ahora, muerte arriba, condenándolo  a participar de una "agonía feliz" rumbo a sus sorprendidos cien años...
! Precaucíón nostálgicos ! contagia su ventarrón intemporal...
                                                                                           

                                                                                        Adriana Nazca.

STEFAN ZWEIG.
No recuerdo bien cuando cayo en mis manos el primer libro de Stefan Zweig : " Veinticuatro horas de la vida de una mujer" me pareció un gran escritor, capaz de penetrar en los más complejos estados mentales, no solo de sus personajes, ( al parecer tiene biografías que intentare localizar), últimamente he confirmado esa opinión leyendo: " Novela de Ajedrez" e " Impaciencia del corazón , supongo que quiero con estas lineas expresar mi gratitud a los buenos ratos proporcionados por su generosa brillantez y si fuera posible compartirla con otras criaturas más o menos confusas como yo. Es también la oportunidad de rendir homenaje a sus relatos profundamente humanos y actualizar una memoria que se me antoja perdida en el fragor mediático.
Siempre es bueno reincidir en lo que fueron gratas sorpresas. Azar o elección que termina configurando nuestra actitud y por lo mismo nuestro viaje.
Brindo con este brebaje extraño que es la literatura !!

Adriana Nazca.

PRE -TENSIONES.
Busco en el último libro
la idea que me salve de la nada
que me salve de las alambradas refinadas,
de los razonamientos ciegos,
a propósito de esta realidad
que todo lo asfixia
y nos convierte en forasteros de la historia...


 Adriana Nazca.

Mujer, hecha de renuncias
en años malditos,
vives la víspera de un
encuentro original,
convocada a la procesión
imparable de los días,
de antemano te pienso
iluminada por la razón.